Autoconsumo fotovoltaico

En otras ocasiones hemos hablado sobre ¿Qué es el autoconsumo? Hoy, os explicamos en qué consiste el autoconsumo fotovoltaico.

En la modalidad del autoconsumo energético a través de fuentes renovables, el autoconsumo solar fotovoltaico es el más común. Algunas de las claves de su auge son, a diferencia de las tecnologías para la generación eléctrica a través de otras fuentes, su modularidad, sencillez en el montaje y adaptabilidad en diferentes emplazamientos. Esta última característica es clave, en especial, para integrar este tipo de instalaciones, por ejemplo, en cubiertas industriales.

Componentes de una instalación de autoconsumo fotovoltaico

Las instalaciones de autoconsumo fotovoltaico cuentan con los siguientes componentes:

• Módulos fotovoltaicos o placas solares: pueden ser los convencionales en cualquier instalación de generación fotovoltaica o bifaciales. Los módulos bifaciales están diseñados para recibir radiación por ambas caras y por consiguiente, la producción energética es superior.
• Estructuras: habitualmente son fijas y en los últimos años han evolucionado hacia estructuras funcionales, ligeras y rápidas de instalar. Además, para cubiertas inclinadas existe la estructura coplanar. Para el caso de cubiertas planas, existen diferentes opciones entre las que se pueden encontrar las estructuras lastradas o diseños personalizados. Por último, también se pueden incorporar estructuras con seguidor combinadas con módulos bifaciales aunque en instalaciones sobre cubiertas es menos habitual.
• Inversores: generalmente se emplean los inversores en string aunque en aquellas instalaciones de autoconsumo dotadas de acumulación de energía, es necesario el uso de inversores híbridos que brindan la oportunidad de gestionar las baterías y el almacenamiento de energía desde el propio inversor.
• Otros elementos: de forma adicional a los elementos anteriormente mencionados, una instalación de autoconsumo fotovoltaico requerirá de la integración de otros componentes como son cableados, protecciones, equipos de medida...

Cada vez la gestión de las instalaciones se encuentra más digitalizada. Tal es así, que existen herramientas de gestión de las instalaciones que permiten tanto visualizar los parámetros técnicos de la instalación como actuar sobre ella de forma telemática para ejercer un mayor control sobre la propia ejecución.

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